Mi papá es un
payaso
Oído
en el Circo Atayde
El oficio de Payaso es uno de los más
contrastantes por varias razones; entre las principales se encuentran:
Tienen que aparecer sonrientes,
aparentando estas felices y hacer reír a los demás principalmente niños, sin
importar lo que esté pasando con ellos en su vida personal.
Otra más es que sin importar su calidad
y lo bueno que sean, siempre serán llamados despectivamente payasos o payasitos
y nunca los tomarán en serio.
Enrique Pérez Ramírez era mejor
conocido como el “Payaso Canelas” y trabajaba junto a su hijo: Enrique Pérez
Juárez “Canelitas” en fiestas
infantiles.
Fueron pareja durante 10 años de los
ocho a los 18 del hijo, hasta que él mismo le dijo a su papá que deseaba hacer
otra cosa como estudiar la Universidad y pasar más tiempo con sus amigos y su
novia.
También la mamá y esposa de ambos; se empezó a dar cuenta que Enrique junior
había cambiado mucho y ya no era el muchacho acomedido y servicial que era
hasta hace poco.
Si bien no tenía vicios y no fumaba,
tomaba ni consumía drogas: sí se había vuelto un poco altanero y algo
mentiroso; por lo que se hacía necesario hablar en serio con él.
Eso le correspondía a su papá el
“Payaso Canelas”; que antes de serlo, era el papá de Enrique y casi era
inaplazable la tan esperada conversación de “Hombre a hombre” entre padre e
hijo.
Aun así, Enrique padre, seguía
postergando esta plática, porque esperaba que su hijo se diera cuenta solo, que
debería de volver a ser el chico bueno de mamá.
Mientras tanto seguía trabajando como
payaso en fiestas infantiles y a pesar de su problema familiar; tenía que
presentar su mejor cara para hacer reír a los concurrentes.
Así hubo una especie de tregua entre
los Enriques y a pesar de las grandes diferencias que había entre ambos durante
tres meses; en los cuales se trataban con diplomacia.
Cuando parecía que tendrían unas
vacaciones de verano tranquilas, el sábado 2 de junio; una compañera de Enrique
chico, se fue a quejar con su mamá de que estaba embarazada y su hijo no quería
hacerse cargo, alegando que no era suyo.
Eso fue “La gota que derramó el vaso” y
esperó a que regresara de una fiesta a donde había ido a trabajar y sin dejarlo
quitarse el disfraz. Le comentó lo sucedido y:
Enrique Pérez Ramírez muy enojado le
dijo a:
Enrique Pérez Juárez:
“No le hagas al canelas y hazte
responsable de tus actos: de esa mujer y de tu hijo”
Y para terminar le preguntó
“Porque ¿Somos hombres o payasos?
Sala de mi casa
22:00 – 23:00
p.m.
2/VI/2018
1 comentario:
Triste realidad caballero esa es la profesión más difícil hoy en día hacer reír a los demás y claro todos somos humanos y cometemos errores
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