Este blog fue creado pensando en Dacne y está dedicado a Wendy González Salinas

domingo, 31 de julio de 2016

MAN QUE ASTED LO QUERA (CUENTO) Por Carlos Bernal Romero

Para nuestro Dilecto Amigo Irlandés
Y las deliciosas pláticas de madrugada

De alguna manera: Todos somos hijos del Cine Mexicano
Oído en Cinemex Aragón

Mucha gente dice que tanto los indígenas como los pueblos donde viven; son completamente idílicos, sobre todo en las películas de Emilio “El Indio” Fernández.

Entonces todas las historias, que hablen sobre el campo y no sean contadas por uno de sus habitantes, tienen mucho parecido; con lo que vemos en Pantalla Grande y no sean contadas por una mujer u hombre campesinos, tienen mucha deuda con esas cintas.

Amalia y Alberto vivían en una hacienda llena de animales, sembradíos y peones. Tenían 20 años de casados y dos hijas: Alejandro y Patricia. Los empleados de más confianza eran: Pedro Soria Díaz y la vieja nana Cecilia.

-Niña Amalia ¿Ya pongo la mesa?

-No más pera que lleguen los niños y el patrón

Mientras tanto Pedro y el Patrón hablaban en el cuarto principal de la hacienda:

  -Man que asted lo quera patroncito, esta tierra ya no quieri dar pa más

-Pos lo que pasa es fácil de averiguarlo. Ansina se divisa  que astedes no la laboran como deberían.

-No somo huevone Niño Alberto. Yo mesmo divise la siembra. Acuérdese su merced: “Todo por servir se acaba”

A las dos dela tarde se sentaron a comer. Alberto estaba sentado en la cabecera derecha; Amalia al frente y a la izquierda de él los niños :Patricia y Alejandro.

-Tata ¿Por qué no le dice a la Nana Cecilia que se lo siente con nosotros?

La nana e menudo y los antojitos a cada uno de ellos

-¿Cómo pasa a creer el niño Alejandro que esta vieja puede aposentarse ahí mesmo donde los patrones.

-Mesmamente lo había tanteado arribando el alba. Mañana mesmo se lo van a sentar con nosotros la nana Cecilia y Pedro.

Sucedieron varios días haciendo lo mismo; parecía que la vida no pasaba por “Villa Fernández”. Cuando Pedro Soria irrumpió en el cuarto de Alberto:

-Patrón nos está llevando “La tía de las muchachas” tiene rete hartos diyas que no lo llueve y pos la tierra se empieza a secar.

-No te lo quería decir, con esos pensamientos te lo vas s podrir en los merititos infiernos; pa que es más que la verdad.

-Man que asted  no lo quera creer, si no lo llueve  nos lo vamo a quedar sin animalito ni siembra, rete probes.

Había pasado una semana y la sequía se acrecentaba. Empezaron a morir los primeros animales. La situación empezaba a volverse desesperante para todos.

-¡Tata, Tata! ¡Mi hermanita Patricia se nos muere!

Aberto llegó corriendo al cuarto de su hija  vio tendida en su cama y ¡ardiendo en calentura!

-Mi niña no nos dejes te lo queremos mucho 

Se arrodilló. No tuvo las fuerzas para ver a su esposa Amalia y a su hijo Alejandro y empezó a rezar.

-Madre Santa. Sálvame a ni Patricia, no me importa que a la tierra se la lleve la fregada, pero a mi ángel déjalo aquí.

Con voz muy débil Patricia les dijo a sus papás:

-Tatas mis “tilichitos” están arriba en el arbolito. Me voy a subir tantito pa ver si lo veo llover.

Dejó de hablar y esbozó una sonrisa         

En esos momentos empezó a llover en ”Villa Fernández”

Burger King La Plaza Oriente
17:00  -  18:00 p.m.
30/VII/2016

1 comentario:

Unknown dijo...

Caballero no comprendi el cuento saludos