Este blog fue creado pensando en Dacne y está dedicado a Wendy González Salinas

domingo, 3 de septiembre de 2023

EL TATUAJE (CUENTO) Por Carlos Bernal Romero

Para Alberto

Que como yo es enemigo de los tatuajes

 

-¿Papá puedo hacerme un tatuaje?

Maluma


De unos diez años a la fecha y sobre todo en los deportistas profesionales se hizo una práctica muy común traer uno o más tatuajes en todo el cuerpo; sobre todo en lugares visibles.


Un ejemplo muy claro son la mayoría de los futbolistas de la llamada “Liga Mx”; son tantos que difícilmente se podría “armar” un equipo bueno y competitivo con 15 jugadores que no estén tatuados.

         

Esta digamos “moda” también llegó a la Sociedad Mexicana y en la actualidad vemos en las calles; hombres y mujeres, por lo general de 18 años en adelante; con uno o más en su físico.

         

Alberto Pellicer Montecinos era enemigo acérrimo de los tatuajes y casi bastaba que una persona tuviera uno; visible en cualquier parte del cuerpo para que él; la “Mal viera”

         

Le decía a todos los que lo quisieran escuchar:

         

“Nunca he entendido por qué la gente se tatúa; siendo el cuerpo tan bonito y en algunos casos perfecto; simplemente lo echan a perder y tanto hombres y mujeres pierden prestigio y credibilidad.


Un día su esposa: Monserrat Arregui le dio a entender que la hija de ambos:

         

Esperanza Pellicer Arregui


se quería hacer un tatuaje para celebrar su cumpleaños número 18. 

La respuesta de Alberto fue tajante y rotunda:

         

¡Por supuesto que no tiene mi permiso!

         

Monserrat lo miró a los ojos y con el puro gesto y sin palabras le dijo:

         

“¡Ay Alberto!”

         

Oriundos de Madrid y vecinos permanentes de la Ciudad de México; donde por motivos del trabajo de Alberto pasaban por lo menos la mitad del año; la otra cosa que deseaba de regalo Esperanza era conocer Berlín.


Dos días antes del cumpleaños ellas viajaron a Alemania; dejando a los hombres de la casa: Alberto y Jonás esposo hijo y hermano tanto de Monserrat como de Esperanza.

         

Alberto había escuchado alguna vez que la cantante favorita de su hija era la inglesa Adele; porque además de gustarle su forma de cantar y componer; le agradaba mucho su forma de actuar.

         

Cuando ambas regresaron del viaje; Monserrat le dijo a Alberto:

         

-Se lo hizo

         

Más que enojado; resignado preguntó:

         

-¿Qué se puso de tatuaje?

         

La mamá esposa respondió:

         

El nombre de su ídolo

         

Alberto suspiró y pensó:


“Por lo menos el nombre de Adele escrito en una parte de su cuerpo será imperceptible”

         

Lo que no sabía era que la mujer, que aparte de su mamá, más admiraba su hija:

         

Esperanza Pellicer Arregui

         

Era a Carlota de Bélgica cuyo nombre completo es:

         

María Carlota Amelia Victoria Clementina Leopoldina.

       

 La Casa de Las Luna

22:0023:00 p.m.

2/IX/2023

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