Era tan pobre
que estaba en deuda
conmigo mismo
Memorias
de
un niño de la
calle
Algunas
personas sin importar su posición económica, en vez de dinero pagan sus deudas
con otro bien o servicio que consideran vale lo mismo, que el que adquieren o
deben.
Entre los pobres
esta práctica se llama trueque, entre los ricos o “pomadosos”, como les dice el
Abuelo Geno, se le conoce con el nombre de “Intercambio de favores”.
Por raro que
parezca, la clase media no realiza esta práctica y ya sea al “chaz, chaz”,
crédito o a plazos, pero trata de pagar todas las deudas que adquiere.
Mireya Roja
Moreno tenía el “Síndrome Maradona”, que consiste en creer que con su presencia
o usar ciertas marcas, los dueños de las mismas, o los establecimientos donde
consumen, no deben cobrarles porque ellos, les están dando publicidad.
De esta manera a
partir de que empezó a adquirir cierto renombre y fama como modelo, se
acostumbró a no pagar absolutamente nada de lo que usaba.
Primero porque sus patrocinadores lo hacían para
tenderla contenta y no firmara con otras marcas y fuera exclusiva de ellos por
varios años más, para que les hiciera ganar mucho dinero.
Después los
galanes le complacían hasta el más mínimo capricho. entonces se mal acostumbró
a usar su presencia como:
“Letra de
cambio”
Así pasaron
alrededor de diez años, gracias a que su rostro y físico eran preciosos y
perfectos, para deslumbrar a cualquiera, sin importar si era: Hombre, mujer o
quimera.
Definitivamente
Mireya Rojas lo era todo.
Al décimo primer
año de su carrera, le cayó la “Maldición de los tas” y cumplió 30 años,
demasiados para el mundo del modelaje y se le empezaron a notar.
Al
cumplir 32 años y en plena decadencia física, le surgió una deuda de 20 mil
pesos y para no variar y no perder la costumbre de joven, no tenía dinero.
Como último
recurso fue con uno de sus antiguos pretendientes y le dijo:
-Préstame 20 mil
pesos
Su ex le señaló algo que nunca había escuchado
en su vida:
-¿Cómo me los
vas a pagar?
Se enojó por la pregunta, pero se contuvo y
respondió:
-Con sexo
El antiguo
pretendiente lo pensó un instante y ante el asombro de:
Mireya Rojas
Moreno
Puntualizó:
-Pero
me seguirías debiendo 19.500 pesos.
El Portón Plaza Eduardo Molina
15:52 - 16:52 p.m.
21/XI/2013
